Alguien muy cercano y a quien quiero mucho un día me aconsejo: "las reflexiones no se comparten, se las hace uno y ya" (no se donde diablos leyó eso o por que lo cree así, pero es muy respetable)
Los que me conocen saben que no sigo muy bien los consejos, así que aquí les comparto esto...
Ayer estaba platicando con una señora que me dice que sus padres eran alcohólicos los dos y que eran muy violentos. Ellos vivían en una casa de cartón en una de las muchas invasiones que hay en Hermosillo.
Me platico que desde los 9 años se iba temprano por las mañana a juntar botes de aluminio porque una de sus hermanas "mayores" (tenia 16 años) ya tenia una bebe y ella vendía los botes para comprarle leche entre otras cosas.
Ella me platico que de niña ya pensaba que cuando fuera grande y tuviera sus hijos no permitiría que vivieran lo mismo que ella.
Me platico algunas cosas muy fuertes que la verdad se los dejo a su imaginación...
Pero lo relevante de esta historia (por respeto no publico su nombre ya que siento es algo muy privado) es que mientras me platicaba después de algunas voces entre cortadas y un par de lagrimas me pregunta: "¿como crees que yo podría seguir los mismos pasos que mis hermanos y mis padres?"
Me impacto mucho, porque la señora es hoy día una empresaria que le va muy bien y me llamo la atención porque pareciera que todo estaba en su contra para que ella fuera una estadística más de lo que el INEGI llama "en pobreza extrema" o "madre drogadicta soltera"...
Esta niña ahora mujer no sucumbió a lo aparentemente inevitable, y yo le dije que eso era digno de mucha admiración, porque contestando a su pregunta, era mas probable que hubiera continuado con los pasos de lo que en casa "estaba aprendiendo"...
A donde voy es que, caras vemos corazones no sabemos... Estamos rodeados de personas admirables, que algunas han batallado y otras no tanto pero que han hecho de sus vidas cosas maravillosas...
La gente, esta gente, cambia el mundo todos los días, desde que se despiertan hasta que se duermen lo están cambiando... no son solo testigos de lo "que nos toco vivir" sino que ellos con valor, audacia, coraje, alegría y amor hacen que sus días sean cada unos muy valiosos...
Hay que soltar amarras y lanzarse a buscar el sueño...
Otro buen amigo me decía: "somo como gambusinos siempre estamos buscando el oro"
El oro puede ser dinero o sueños, cumplir metas y llegar lejos...
Mi respeto y reconocimiento a todas esas almas libres que todos los días hacen de este lugar un sitio mejor...
Tengan un excelente día, uno fuera de serie...
Fin del comunicado
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